BUENOS AIRES NUNCA DUERME

Buenos Aires, ciudad con misterio y pasión. Las leyendas atrapantes y mitos que posee esta urbe, se dan a conocer mediante tours fantasmales y pasionales. La agencia Ayres Viajes de turismo es la que brinda a los visitantes conocer el lado extraño y loco que tiñó a esta ciudad de historias tenebrosas, crímenes, fantasmas y también la llenaron de romances.

Buenos Aires Misteriosa, así se llama el tour. Una propuesta diferente que se aleja de las tradicionales visitas a los teatros de la calle Corrientes, el Teatro Colón, Caminito y el Obelisco. Para los curiosos y valientes, se presenta una nueva posibilidad de conocer Buenos Aires de una manera distinta.

En un bus, de noche, que perturba con el fondo musical de Psicosis haciendo de este circuito de aproximadamente 3 horas algo más curioso y morboso, los pasajeros encaminan su viaje hacia los lugares desconocidos de la capital Argentina donde se encontrarán con hechos e historias escalofriantes. Algunos de los puntos porteños que se visitan son el barrio de Monserrat, Constitución, Barracas, Parque Patricios, Recoleta, San Nicolás, San Cristóbal y San Telmo.

Entre las historias más conocidas y temerosas que se relatan en el trayecto, se encuentra la del “Petiso Orejudo”, un joven que fue el autor de la muerte de 4 niños, 7 intentos de asesinatos y el incendio de 7 edificios. Hijo de un padre golpeador, cometió su primer asesinato con tan sólo 7 años a un bebé de 21 meses matándolo a golpes con una piedra en la cabeza. “Es un degenerado hereditario, imbécil que sufre la locura moral, por definición, muy peligroso” decía uno de los informes médicos que están en el Archivo general de Tribunales enviado por la doctora Lucero Negri.

También, se cuenta la de Felicitas Guerrero, considerada la mujer más linda de la Argentina, que según se dice, porque es un crimen no resuelto, fue asesinada por un pretendiente despechado. Sus restos se encuentran en el Cementerio de la Recoleta, y en la Iglesia Santa Felicitas en honor a su nombre en el barrio de Barracas, dicen que su espíritu se pasea.

Otro de los misteriosos relatos que, es el de Rufina Cambaceres, la joven que murió dos veces. Una chica de 19 años que sufrió de un ataque de catalepsia. Los médicos pensaron que había muerto y la pusieron en el ataúd, en la bóveda donde se encontraba su padre. Días después descubrieron a Rufina con la cara y el cajón arañado ya que había despertado en su tumba. Luego de la terrible tragedia, se construyó un monumento que representaba a la adolescente en la puerta de su cripta con la manija en la mano intentando salir.

Hay más historias extraordinarias como la de Yiya Murano, la envenenadora de Monserrat; Juan de Osorio, el primer fantasma oficial; Emilia Basil, la cocinera; el fantasma excitado de San Telmo, entre otros.

“A Buenos Aires Misteriosa le modificamos algunos relatos y parte del recorrido. Antes había más historias de fantasmas, pero agregamos más crímenes porque crean un clima fuerte” dijo Diego Zigiotto, periodista y responsable de la empresa que creó estos recorridos macabros. Así se puso en marcha el Buenos Aires Misteriosa II y III, donde esta vez se visitan los barrios de Balvanera, Chacarita, Colegiales, Villa Crespo, Retiro, San Nicolás, que cuentan las historias de Virginia Donatelli, la joven descuartizada; leyendas urbanas como la del “bebé en el horno”, “no sólo los perros lamen las manos”, “el taxi fantasma”, “la casa de los leones”, entre otros.

Entre los relatos más pasionales que tiene la ciudad se encuentran la de Elisa Brown, hija de del almirante Guillermo Brown, que a los 17 años salió de su casa con el vestido de novia y caminó hacia el río y se quedó allí hasta ser cubierta por el agua, al enterarse que la nave Independencia que comandaba su prometido fue atacada en plena guerra con Brasil en 1827.

Otra es la de Camila O’ Gorman y el cura Ladislao Gutiérrez, que se enamoraron y se juraron amor eterno, huyeron por su amor, fueron encontrados y fusilados estando ella embarazada.

Así presenta Buenos Aires su lado más misterioso, curioso, romántico y pasional, los turistas que pasean por los teatros de Corrientes, por San Telmo, Palermo entre bares y cafés, se encuentran con un lugar desconocido. Al caer el sol, la ciudad se transforma, y se convierte en un laberinto de secretos lúgubres. Buenos Aires si que es misteriosa.